EL EQUILIBRIO ECONÓMICO

La esencia del Sistema Económico, es lograr el equilibrio entre la oferta de bienes y servicios con sus respectivas demandas, que no equivale a decir lograr la satisfacción de las necesidades de todas las personas de la comunidad.  Distinción que es bueno precisar para centrarnos en el ámbito económico y no en lo social, cuyo estudio corresponde a otra rama de las ciencias sociales.

La demanda desde el punto de vista económico, es una necesidad o deseo satisfecho cuantificado monetariamente, que es requerida por las personas a diferentes niveles de precios y cantidades demandadas. Algunas personas podrán atender sus necesidades y otras no, advirtiéndose que, en todo sistema económico existen personas con necesidades insatisfechas, que pueden ser permanentes o parcialmente satisfechas, calificándose como personas pobres o indigentes, cuando no cubren sus necesidades básicas (alimentación, salud, vivienda).

Estas personas están excluidas del sistema económico, ya que el equilibrio se presenta entre la oferta de bienes y servicios y su correspondiente demanda (personas con capacidad de compra) y no con las necesidades de las personas. La presencia de altos índices de desnutrición, enfermedades crónicas, déficit de vivienda, de hospitales, falta de medicinas, etc., no implica un desequilibrio del Sistema Económico, lo que se presenta es una ausencia o limitación de la capacidad adquisitiva de las personas o del Estado para atender estas necesidades.

En la orilla opuesta, se encuentra el denominado Sector  Informal, que realiza su actividad económica fuera del régimen económico[1], que contrariamente a lo que se piensa, no está excluido del Sistema Económico,  sino más bien forma parte de éste y lo retroalimenta o contrae, a semejanza del comportamiento del Sector Externo (importaciones, exportaciones, balanza de servicios y balanza de pagos) de un  país.

Los emprendedores informales, al adquirir y vender bienes y servicios dentro del Sector Informal, están generando ingresos, gastos y todas las variables económicas que sus decisiones puedan provocar. Asimismo, no dejan de participar activamente en el mercado del Sector Formal, por contar con capacidad de compra (compra de electrodomésticos, atención en clínicas, compra de alimentos, vestidos y otros en tiendas por departamentos, adquisición de medicinas, servicios de entretenimientos, compra de todo bien o servicio gravado por un impuesto – IGV -), acrecentando o disminuyendo la actividad económica del Sistema Económico.

En muchos países en desarrollo, la presencia del Sector Informal es relevante en sus economías, llegando a ocupar hasta el 60% del total de la mano de obra, lo cual responde, en buena medida, a su baja calificación, para acceder a un puesto formal, debiendo inventar su trabajo (autoempleo) con el propósito de cubrir sus necesidades. 

Afirmación, que permite inferir que, en economías en desarrollo, donde existe un vasto sector informal, su comportamiento es determinante para alcanzar un mayor nivel de equilibrio del Sistema Económico.

En adición, debe señalarse que el Sector Informal, para desarrollar su actividad económica, por estar operando fuera del régimen económico, se enfrenta a grandes barreras, restricciones y desafíos haciendo que su auto sostenimiento y atención de sus necesidades sean más difíciles y, por tanto, tiendan a afinar su creatividad y habilidades[2].

El equilibrio económico no es estático está en constante movimiento, debido a que se soporta en las decisiones de las personas para cubrir sus necesidades, que se traduce en la demanda de bienes y servicios; la misma que varía constantemente tanto en número como en su contenido, propiciando cambios en el sistema y haciendo muy dinámico, como la moda, gustos, tradiciones, esnob, estado de ánimo, clima, estructura etaria, crecimiento poblacional, enfermedades y, sobre todo, por variaciones en el ingreso de las personas.

Por el lado de la oferta de bienes y servicios, que es la contraparte del equilibrio económico, también, sufren continuas modificaciones, ya sea por la aparición de nuevas tecnologías, mejores procedimientos, innovaciones, avance de los transportes y comunicaciones, competencia.  y los propios cambios de las necesidades de las personas cuantificadas en nuevas demandas.

Del mismo modo, al ser las necesidades ilimitadas, debido a que dependen de la imaginación y deseos de las personas, tienden a que el Sistema Económico, no sea solo dinámico sino también de comportamiento ascendente. Para lo cual se requiere  como condición, que las personas tengan capacidad de compra y que la demanda pueda ser atendida por personas creativas[3] que actúan como proveedores de los nuevos bienes y servicios requeridos.

La señalada ilimitación de las necesidades, hace posible enunciar el siguiente comportamiento económico de las personas. En cuanto el nivel de ingresos de las personas o de una población se vaya incrementando, las necesidades satisfechas (demandas) crecerán en relación directa con el crecimiento de sus ingresos. No es extraño observar, que un deportista exitoso de extracción social humilde, tenga uno o varios vehículos último modelo, de prestigiosas y costosas marcas y hasta compre aviones de uso particular.

Bien se puede decir que el símil del Equilibrio Económico, es una bicicleta en movimiento, en el sentido que las demandas no dejan de fluir conjuntamente con el flujo de bienes y servicios, que se van acoplando continua y permanentemente. Igual que la bicicleta que es conducida por una persona, pero que en este caso el sistema no es conducido por nadie, por se autonómo y presentar su propia dinámica.

Asimismo, cabe señalar que en general, las personas no cubren todas sus necesidades, ya sea que residan o laboren en países desarrollados o en desarrollo. Normalmente, se presentan necesidades insatisfechas, que se muestran con mayor intensidad y número, en los sectores de menores ingresos de los paises en desarrollo. También se manifiestan cuando están cubiertas las necesidades primarias de alimentación, salud, vivienda y vestido. En el primer caso, las personas sufren penurias, angustias, enfermedades; en el segundo caso, no les impide vivir con normalidad, como por ejemplo la decisión de un empresario de no renovar cada 2 años su vehículo, debido a que ese año le fue mal en los negocios.

En algunos individuos esta insatisfacción de las necesidades, puede llegar a extremos, provocándoles inestabilidad emocional y hasta comportamientos depresivos, que los conduce a la angustia y hasta su debacle física y moral. Casos de importantes hombres de negocios o individuos de a pie, adictos a la cocaína ratifican esta afirmación. En el extremo opuesto y parafraseando una las estrofas del vals peruano Cholo Soy[4] , también se presentan personas  con cobertura parcial de sus necesidades primarias y no anhelan ni  requieren de mayores bienes o servicios,  el caso de los ascetas alejados y aislados del mundo lo comprueba.

Conviene añadir, que las necesidades se gestan en las mentes de las personas, inicialmente para atender las necesidades del cuerpo y de su vida, luego de cubiertas, en la mayoría de las veces, buscan generar comodidades, confort, tranquilidad, disfrute, goce, satisfacciones, poder, que se resume en alcanzar una vida cómoda y feliz. Algunos otros buscan alcanzar trascendencia personal.

Los resultados que las personas obtienen, luego de cubrir la necesidad de transcender, “per se” no puede saberse si serán positivos o adversos a la comunidad, lo que sí es válido señalar que, generaría un conjunto de decisiones convertidas en demandas, de contarse con el respectivo poder de decisión y ejecución. Ilustran como ejemplo de transcendencia personal, el inventor del teléfono Graham Bell y en contraposición hay otras personas reconocidas históricamente que han perjudicado a la sociedad.

En resumen, el Equilibrio Económico es una constante que se presenta en toda comunidad y que es un atributo del Sistema Económico y su funcionamiento, que está integrado tanto por el Sector Formal como del Sector Informal, requiriendo que las personas realicen una actividad económica y participen en el mercado, ya sea como demandantes o personas creativas que los atiendan, para que sus decisiones y de las Autoridades Gubernamentales, se reflejen en el Sistema Económico.

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[1] Joseph Lajugie Los Sistemas Económicos Página 6           

El régimen económico no es más que un elemento del sistema. Lo definiremos como el conjunto de reglas legales que, en el seno de un sistema económico dado, rigen las actividades económicas de los hombres, es decir sus hechos y acciones en materia de producción y cambio.

Estas reglas pueden tener un doble objeto:

Las relaciones de los hombres con los bienes: el régimen de los bienes plantea el problema de la propiedad.

Las relaciones de los hombres entre sí: el régimen de las personas plantea el problema de la libertad económica.

[2] Los emprendedores informales, se caracterizan por su reconversión empresarial y reinvención continua, para aprovechar las oportunidades que se presentan en el mercado. No es raro ver a un pequeño emprendedor vender jarabe azucarado con hielo molido en verano (raspadilla en el Perú) y postres calientes en invierno (mazamorra morada, arroz con leche azucarada) o el caso de los comerciantes de ropa de verano y de invierno.

Inicialmente, el emprendedor informal, realiza solo o con su esposa toda la actividad productiva y de comercialización. Concentra todas las actividades económicas en la familia. Cuando crece su demanda y necesita producir más, realiza la división de su trabajo, a través de la contratación de mano especializada. Fenómeno similar al de la economía urbana – artesanal, registrada entre los siglos XIV al XVII, pero ahora utilizándose nuevas tecnologías y procesos productivos artesanales.

[3] Según lo expresado por el filósofo Axel Kaiser, en la Lección 13 de su libro El Economista Callejero. el empresario a diferencia de quienes participan en el mercado, son más escasos y resultan imprescindibles para el progreso. Comparados con los consumidores y trabajadores, históricamente han constituido una población más abundante, los empresarios son mucho menos en cantidad. Personas innovadoras, con el talento, la energía, la disposición al riesgo y la visión para crear riqueza – inexistente en la sociedad -, siempre han sido, y serán, unos pocos.

[4]  Cholo Soy. Vals Peruano del Cantautor Luis Abanto Morales.

    Nosotros los cholos no pedimos nada

    Pues faltándonos todo, todo nos alcanza