
DECISIONES Y SISTEMA ECONÓMICO
Las actividades económicas son consustanciales al hombre, pero la forma como se han venido desarrollando ha sufrido importantes y significativas variaciones, en cuanto a la toma de decisiones para realizarlas y también para su correspondiente distribución de los bienes y servicios producidos, entre los miembros de una sociedad. Así, en la etapa inicial donde predominaban los clanes hasta la época del dominio feudal, las decisiones las tomaban los jefes de los clanes y los señores feudales. Ello sucedió sin ningún cambio de relevancia por muchos siglos de años.
Con la división del trabajo y el intercambio voluntario de las Economías Urbano Artesanales, que impulsaron la aparición y crecimiento de las ciudades, ocurrido en el siglo XI, se atenúan las relaciones de subordinación entre el señor feudal y sus súbditos, desapareciendo, en definitiva, las relaciones de coacción absoluta predominante en una economía cerrada (doméstica pastoril, según J. Lajugie), donde las decisiones de producción, distribución y consumo las toma el padre de familia o patriarca.
Las relaciones de intercambio son libremente pactadas y se basan en prestaciones recíprocas, fijándose los precios de común acuerdo entre comprador y vendedor. Intercambios que se ven favorecidos y acrecentados por la aparición y aceptación generalizada de la moneda.
En esta nueva realidad económica, la cobertura de las necesidades de los miembros del grupo, ya no es bajo la decisión de una autoridad o jefe. Ahora, las personas para realizar el intercambio, deben de manera individual adoptar decisiones, como que precio poner a su producto, que producir, como producir, a quien vender, como también, del lado de la demanda, que bienes comprar, a que precios y en que cantidades, cuyo número de decisiones y su ejecución al acumularse en el seno de la urbe, generan ingresos, gastos, ahorros, entre los miembros de la comunidad.
Extrapolando, la decisión de una persona que vivió en una economía urbana artesanal a nuestra época, se puede dimensionar con mayor claridad el impacto de las decisiones en la economía y el Sistema Económico.
Actualmente, la persona al decidir ir en movilidad propia a trabajar, inciden en la variable importación (por utilizarse gasolina importada). Realizar un aumento de capital o comprar un banco en el exterior, a través del financiamiento de un banco local, propiciaría la salida de divisas que afectaría la balanza de pagos del país.
Decidir la inversión en la construcción de una carretera, significa aportar a las variables inversión, ingresos, consumo, ahorros, tanto de las empresas que participen en la obra como de las personas que son contratadas como mano de obra. Si la obra es realizada por una empresa extranjera, financiada con fondos del exterior, impactará en un mayor ingreso de divisas y en una mejora de la balanza de pagos del país. Mayores niveles de ingresos, consumo y ahorros para la población si la realiza una empresa nacional.
Los ejemplos anteriores explican con propiedad, como las decisiones se materializan en las variables ingresos, ahorros, inversión, consumo, importaciones, exportaciones, precios, tipo de cambio, que son las variables económicas que conforman el Sistema Económico de la comunidad. Asimismo, evidencia la existencia de una relación directa entre decisiones, actividad económica y Sistema Económico.
Sabemos que todas las personas no tienen el mismo poder de decisión; por lo tanto, cuando éste es mayor sus efectos será mucho más impactante en la actividad económica y en el seno del Sistema Económico. La decisión de una ama de casa que va al mercado y compra pollo en lugar de pescado, produce menores consecuencias en las variables económicas, en relación a las decisiones de las personas con mayor poder económico o político.
La decisión del Presidente de un país de reducir o aumentar el Impuesto a las ventas, involucraría inversión, ingresos, consumo, ahorro, importaciones, exportaciones, tipo de cambio. Ocurre algo similar en la decisión del presidente de una Corporación Transnacional, de ampliar la capacidad instalada de su emporio minero, cuyos efectos en las variables económicas se sentirían más en el país.
Después de lo citado respecto al impacto de las decisiones en el Sistema Económico de un país, es fácil entender que igual que un procesador de textos, no podrá producir una obra literaria ingresando palabras sueltas y sin sentido; lo mismo es de esperarse, de los resultados que pueda mostrar un Sistema Económico, cuando las personas que tienen mayor poder de decisión y capacidad de ejercerlo, toman decisiones que son contrarias con las leyes básicas de la economía y que afectan el Sistema Económico.
Resulta congruente con lo anteriormente expuesto que, en un país que es gobernado por una sola persona, que acapara todos los poderes del Estado, que comprenden al Poder Ejecutivo, Poder Legislativo, Poder Judicial y el Poder Electoral, las decisiones que adopta, en casi todos los casos, no favorecen al Sistema Económico, por el contrario, lo más probable, es que lo perjudique.
La experiencia histórica demuestra que los gobiernos que han podido separar e independizar los poderes del Estado, son los que han avanzado con mayor éxito en el desarrollo de su economía y del Sistema Económico. La monarquía inglesa del Siglo XIX con la participación de un congreso elegido por voluntad popular, grafica esta afirmación También, lo comprueba, pero en sentido contrario, el Gobierno de Corea del Norte en pleno Siglo XXI.
En línea con lo comentado, con mayor o igual perjuicio para el sistema, es darle poder de decisión y ejecución a una persona, que no tienen un estándar mínimo para ejercerlo, llevando al gobierno a tomar decisiones erradas, afectando adversamente al Sistema Económico y trayendo consecuencias económicas, políticas y sociales, difíciles de manejar, que a la larga tienden a generar oposición y hasta la destitución del gobernante.
La simpleza de la relación entre las decisiones ordinarias o complejas que a diario tomas las personas y el Sistema Económico, no es óbice, para comprender su importancia y, sobre todo, entender el comportamiento del Sistema Económico, con la finalidad de diseñar y aplicar apropiadas medidas de política económica acorde con su funcionamiento.